Ciudad de VIGO-Pontevedra.
Iglesia de Santiago de Bembrive
Esta iglesia se encuentra en la
parroquia de Bembrive en el barrio de Mosteiro, en la entrada a la ciudad de
Vigo, es una de las tres iglesias del románico que se conservan en esta zona,
con la de Santa María de Castrelos y San Salvador de Corujo.
El comienzo de su historia, es
recogido en escritos sobre la época medieval, así mencionan el uno de septiembre del año 915, como fecha
en que el rey don Ordoño II y su esposa doña Elvira, hacen donación de Bembrive
en tierra de Turonio a la iglesia de Lugo.
El veintinueve de octubre
AlfonsoV donó a la iglesia de Compostela una iglesia en el obispado de Tuy, que
tenía por nombre San Pedro de Bembrive.
Es por el año 1156, en una
escritura de esta época, donde se menciona una cita de la iglesia de Santiago
de Bembrive, en tierra de Fragoso.
Corría el año 1169, cuando el
rey Alfonso de Portugal, concede al obispo Juan de Tuy y a sus sucesores el
realengo de Bembrive, con la iglesia de Santiago, esta donación fue confirmada
por Fernando II de León en el año 1179.
Comentario de su
arquitectura de D. Isidro Bango Torvigo.
Bibliografía: "VIGO en su historia".
La iglesia actual es de una
nave, modificada, y un ábside semidecagonal al exterior y semicircular por el
interior.
La fachada occidental está muy
restaurada. En el centro una puerta de dos arquivoltas en arco apuntado, con chambrana
de seis filas de tacos, las arquivoltas baquetoneadas entre dos medias cañas,
están decoradas con flores hexapétalas inscritas en círculos, con bolas y tallo
sinuoso con hojitas en los senos.
El tímpano de sillares es
postizo, las arquivoltas descansan en dos pares de columnas de capiteles
entregos, las basas están cubiertos por el pavimento actual; los fustes
monolíticos y adosados, los interiores son entorchados. Los capiteles de la
derecha representan en sus cestas, una red de entrelazos de cordón liso; dos
leones afrontados, con las patas enmarañadas por tallos; los ábacos con chaflán
recto decorados con losanjes o flores; es
tal su desgaste, que no se puede precisar más su definición. Los capiteles de
la izquierda; dos cuadrúpedos afrontados, en uno; en el otro vegetal de hojas
similares a bastones y con caulículos; los ábacos también muy desgastados,
presentan labor de cestería. Sobre la puerta hay un hueco de un óculo, pero sin
decoración alguna. El resto de la fachada rehecha, dos sillares muestran
decoración de flores hexapétalas, material reaprovechado. La articulación de la
fachada en una puerta de arco apuntado sobre columnas de fuste entorchado y
sobe ella un óculo, lo podemos ver en
iglesias como Arcade y Romay.
La fachada meridional tiene dos contrafuertes,
efecto de la prolongación de los muros transversales de la nave; otros dos
contrafuertes postizos en el centro. Falta el alero románico; los distintos
elementos decorativos, colocados arbitrariamente por la fachada, parecen indicar la
reconstrucción del muro con materiales primitivos. Siete florones hexapétalos,
similares a los de la fachada principal, podrían ser metopas del desaparecido
alero. La cesta de un capitel de dos hojas carnosas y muy desgastadas,
¿correspondería a una columna de ventana?. En un sillar se ve una figura humana
con túnica corta y manos recogidas sobre la cintura, separadas por un vástago
de otra figura humana, rota por la mitad. Están muy desgastadas. También se
conservan en este muro parte de un dintel pentagonal, roto por una puerta
moderna y por la ubicación de un contrafuerte. Se efigiaba en el centro de este
dintel, en un círculo, un cordero con la cabeza y las patas entrelazadas por
vástagos que el animal muerde por su extremo.
La fachada septentrional es de
igual estructura a su opuesta. Solo se diferencia en que se conserva una puerta
de arco apuntado, con chambrana de siete filas de tacos con una cenefa de
dientes de sierra; la arquivolta , de baquetones y media caña, descansa en un
par de columnas de basas y capiteles entregos, fustes monolíticos y adosados,
el izquierdo roto. El capitel izquierdo de un orden de hojas rizadas en
espiral, el derecho de entrelazos de un cordón liso; los ábacos de dos cavetos
escalonados, el izquierdo roto. En el tímpano una cruz de San Andrés de lazos
inscrita en un cuadrado; otros de una cruz patada ; rellenando los brazos de
una primera cruz flores inscritas en círculo, otra flor al exterior del
cuadrado y a los lados dos espirales,
El ábside se une directamente a
la nave sin codillo alguno, el tramo recto limitado por un contrafuerte hacia
oriente; a partir de aquí se inicia la parte pentagonal con cuatro columnas entregas en las esquinas.
Las basas son de perfil ático, una con el plinto decorado con una labor de
cestería; el fuste es de doce semitambores entregos. El tema iconográfico en
las cestas de los capiteles desde la más
meridional es el siguiente: un orden de
hojas terminadas en espiral; un orden de hojas lisas con pomas, muy
desgastados; personaje, con vestido largo y manos juntas sobre el pecho, entre
dos leones, cordón liso escribiendo entre lazos, igual que el que hemos visto
en el capitel de la puerta occidental. El alero se compone de cobijas, cuyo
frente lo constituyen tres nacelas escalonadas; el sofito y las tabicas van
decoradas con margaritas inscritas en
círculos. El tema de los canecillos desde el extremo sur al norte es: hoja
picuda, hombre sentado en cuclillas con algo entre las manos, cabeza de animal,
canecillos de dos lóbulos, canecillo de hoja en espiral, canecillo de una fila
de cinco baquetones y otro superpuesto, un can de una fila de cinco rollos,
personaje de postura acrobática invertida,-la cabeza apoyada en la
nacela-,cabeza de animal, hoja picuda rizada, personaje tocando la viola,
personaje en cuclillas que se lleva algo a la boca, hoja picuda con poma en el
envés, hoja picuda, canecillo de dos lóbulos, hoja espiral, cuadrúpedo apoyando
sus patas en la nacela, hoja en espiral, cuartos delanteros de un animal que se
lleva las patas a la boca, personaje bebiendo de un tonel, canecillo de tres
rizos. Pertenece este alero aun prototipo perfectamente conseguido en las
partes más antiguas de la catedral santiaguesa; el románico popular lo va a
mantener hasta los setenta de la duodécima centuria. A partir de este momento
este tipo de alero deja paso a paso a otro que denuncia elementos decorativos
claramente protogóticos, canecillos de proa, motivos geométricos etc.
Interiormente la nave está cubierta
con un aboveda miento moderno. En los muros laterales, fragmentos de una
antigua construcción reaprovechados: restos de decoración cordiforme, de una
cruz de lazos y una hélice. Dos pares de columnas compartimentan en tres los
muros laterales. La basas de éstas
son de perfil ático, los fustes
de semi tambores entregos, los capiteles de dos órdenes de hojas en forma de
bastón, el cuarto capitel también de
hojas pero con poma en el envés. Estas columnas servirían para apear arcos de
los posibles fajones del aboveda miento de la nave.
El arco triunfal apuntado y doblado,
con chambrana de hojas alanceoladas; el
arco doblado de bocel con medias cañas adornadas con rosetas. Paralelo a este
arco hay un segundo en función de fajón, ambos arcos se apean en dos pares de
columnas entregas. Las basas son de
perfil ático con garras, el plinto decorado con una cadeneta de rombos en una
basa septentrional. Los fustes de semi tambores de entregos muy uniformes en
altura. Las cestas de los capiteles vegetales, con hojas en forma de bastón,
entres, y el cuarto de tres órdenes de hojas con pomas en el envés. Los ábacos
son de tres nacelas escalonadas; se impostan hasta los muros laterales de la
nave, uniendo los ábacos de los capiteles imposta de billetes, ésta en la parte
de hemiciclo ha sido picada. El tramo recto se cubre con una bóveda de cañón
agudo y el hemiciclo con una de horno.
El Museo de Pontevedra conserva
dos cestas de capitel de grandes hojas sobre las que sobresalen los calículos;
proceden según consta en el archivo del Museo, de la iglesia de Bembrive.
La actual iglesia , aunque muy
reconstruida, corresponde a un periodo cronológico que puede comprender el
último tercio del siglo XII. El conjunto del ábside con el tipo de alero
descrito tendría que ser anterior al año 1170;sin embargo arco triunfal,
capiteles, y fachada occidental están denunciando una cronología de último
tercio de siglo. Como data "ante quem" tendría que ser el año 1185
del epígrafe funerario, por lo menos para el ábside. El año 1223 podría
indicarnos obras parciales del templo; los florones reaprovechados en los muros
están relacionados con obras muy próximas a ésta cronología en las vecinas
iglesias de Castrelos, Parada y otras.
Inf/Alf
VIGO